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EL GALGO, ideal como animal de compañía

La realidad es que los galgos se crían en diferentes zonas de España por los llamados galgueros, de forma indiscriminada. Seleccionan los que en apariencia pueden ser los más veloces, para después probarlos en el campo. Los que no superan este examen están condenados. Los más afortunados serán abandonados en lugares alejados de las fincas donde se criaron. Los menos afortunados encuentran la muerte: los ahorcamientos, tirarlos a pozos o envenenarlos son métodos usados con frecuencia. Las sociedades protectoras de animales conocen los métodos que usan para colgarlos:"Algunos galgueros se apiadan un poco del animal, lo sostienen como a un bebé y de repente le quitan los brazos para que caiga de golpe con todo su peso. Así se les parten las vértebras y el sufrimiento es menor. A esos perros, con los meses de estar colgados, el cuerpo se les desprende de la cabeza y caen al suelo. Pero hay otros que dejan al animal con las patas traseras apoyadas en la tierra. Y así se pueden llevar los pobres hasta dos horas y media agonizando. Otros, los más crueles, lo dejan atado al árbol hasta que muere de hambre y de sed". Los asesinos afirman que es una muerte digna, "por tradición", y que no les pegan un tiro porque "un galgo no vale una bala". Sé que son comentarios muy duros, pero ésta es la cruel realidad.

De los galgos que consiguen ser rescatados, muchos son adoptados fuera de España, ya que en el resto de Europa son muy apreciados. En España existe una tendencia a considerar que son perros de pobres, pero parece que esta situación está empezando a cambiar, siendo cada vez más frecuente tener galgos como animales de compañía.

Es una raza que sin duda merece ser conocida fuera del ámbito de la caza y las carreras:

El Galgo es una raza canina autóctona de España, por lo que también se le conoce como Galgo español

Los galgos tienen aspecto atlético y estilizado, con patas largas y pecho voluminoso, que les permiten alcanzar grandes velocidades. La altura a la cruz suele ser 62-70 cm en los machos, y de 60-68 cm en las hembras. La capa típica es de pelo corto, liso y muy fino. Pero existe también la variedad de pelo duro, que presenta pelo áspero y largo, repartido homogéneamente por el cuerpo, con barba, bigotes y tupé. Los colores más típicos son: barcino o atigrado, negro, barquillo, tostado, canela, amarillo, rojo, blanco, berrendo o pío.

Educar a un Galgo español no supone demasiado esfuerzo, pero sí un gran despliegue de cariño y comprensión. Su pelaje corto y apretado, en ocasiones duro, requiere un aseo mínimo. Se adapta perfectamente a cualquier entorno y clima, siendo feliz junto a su dueño sin importarle el entorno que le rodee. 

Se trata de unos perros obedientes y tranquilos, muy cariñosos y participativos con la familia. Con sus dueños son fieles y llegan a ser muy dulces (la mirada de un galgo es única). Son rústicos y resistentes y demuestran tener una gran iniciativa y mucho tesón.

El galgo es un perro majestuoso, veloz como el viento y ligero como una pluma. Una raza venerada en la antigüedad, hasta el punto de haber estado prohibida, durante una época, su tenencia por parte de campesinos y gente pobre, pudiendo ser poseídos solamente por la nobleza y aristocracia.

Hoy en día sus virtudes son también su perdición. ..SU GRAN VELOCIDAD ES SU DESGRACIA..personas sin escrúpulos, se aprovechan de esta característica del animal para explotarlo de las formas más crueles que se puedan imaginar, y cuando no sirven ni para correr ni para cazar les espera la peor de las suertes.

En nuestro país las cifras de abandono son vergonzosamente escandalosas, pero cuando hablamos además de tortura, ensañamiento y miles de asesinatos cada año, no podemos quedarnos de brazos cruzados.

Personalmente os animo a que si tenéis oportunidad os acerquéis a esta preciosa raza y comprobéis por vosotros mismos el maravilloso perro de compañía que es el galgo; extremadamente inteligente y sensible, limpio y discreto, dulce, paciente y cuidadoso con los niños y la gente mayor. 

No quiero terminar sin presentaros a mi galguita Vela, la encontré hace un mes en la calle en muy mal estado, y ahora ya veis, totalmente recuperada y lista para disfrutar de la vida como se merece.