Como ayudar a mi perro en caso de vómito
Antes de entrar en pánico al ver que nuestro mejor amigo parece vomitar (o lo hace), debemos tener presente la siguiente información si es que deseamos ayudarlo de una manera efectiva.
En primer lugar tengamos muy presente que el vómito ocasional en los perros es normal y que no debe preocuparnos, ya que es la forma en la que su organismo se libra del exceso de comida, del exceso de agua o del alimento en mal estado.
A veces un perro sano vomita porque comió demasiado rápido su alimento, otras veces lo hace porque comió hierba y la expulsa junto con una pequeña cantidad de saliva.
Si comió algún “objeto extraño” debemos dejarlo vomitar para que lo expulse, y cuidar que no vuelva a comer cosas raras.
Por lógica si nuestro perro vomita de una manera constante existe la posibilidad de un problema estomacal grave, si lo que expulsa contiene sangre o vemos que sufre de fiebre o diarrea es momento de correr inmediatamente con el veterinario.
Pero si sospechamos que se trata de una simple indigestión por los motivos que ya mencionamos y ha vomitado con cierta frecuencia podemos aplicar algunos remedios caseros que quitarán el malestar de nuestro mejor amigo y que nos permitirá ahorrar una buena cantidad de dinero en el proceso.
Descanso
Es muy importante que nuestro perro pueda descansar después de vomitar, los veterinarios recomiendan que reposen por lo menos 12 horas y al término de este plazo darle porciones pequeñas de alimento por 2 o 3 días hasta llegar a la cantidad habitual.
Algo para la indigestión
Cuando nosotros tenemos un problema de indigestión, la sal de uvas es un remedio muy eficaz, lo mismo puede ayudar a nuestro perro para que se recupere, solo necesitamos disolver una cucharadita de sal en un vaso de agua y dárselo a nuestro amigo.
Todo con medida
Cuando un perro vomita, necesita recuperar los líquidos perdidos y es probable que se lance sobre su recipiente de agua y se la acabe en cuestión de segundos, si lo permitimos, eso podría hacerlo vomitar otra vez.
Es importante que le demos solo un poco de agua cada hora para evitar esto, una manera muy buena de hacerlo es darle cubitos de hielo, esto dosificará la cantidad y le ayudará a calmar sus deseos de masticar algo.
Un premio siempre ayuda
Un refresco de sabor naranja o limón le ayudará a nuestro perro a sentirse verdaderamente bien, esto es debido a que la efervescencia de la bebida calma su estómago y el azúcar lo recubre y suaviza, es importante considerar las siguientes dosis según sea el caso:
Perros Pequeños: Una cucharada de refresco al día.
Perros Medianos: Una cucharada cada media hora y un máximo de 3 veces al día.
Perros Grandes: Dos cucharadas cada media hora y un máximo de 3 veces al día.
Estos consejos son muy sencillos, económicos y eficaces, cuando los lleves a cabo, no solo tu mejor amigo se sentirá mucho mejor, tú también te sentirás el mejor dueño del mundo.