Cuidado con la próstata en el perro anciano
A medida que los perros envejecen, sus órganos también lo hacen por lo que pueden estar mas predispuestos a sufrir infecciones y enfermedades. La edad en la cual puede haber riesgo de problemas de próstata es a partir de los 7 años, aunque en raras ocasiones, lo sufren también perros más jóvenes.
Los problemas de próstata son bastante comunes en los perros de edad avanzada. La próstata es un órgano masculino que varia el tamaño dependiendo de la raza, pero además el tamaño de la próstata varía con la edad y se estima que un gran porcentaje de perros de mas de diez años tienen la glándula prostática aumentada, aunque en la mayoría de los casos no presentan síntomas concretos.
Las patologías relacionadas con la próstata presentan síntomas muy distintos entre un perro y otro, pero, sea cual sea su causa, presentan una serie de síntomas que en algunos casos pueden ser similares a los de otras dolencias como fiebre, malestar general, falta de apetito, pérdida de peso o vómitos.
Los síntomas característicos de las enfermedades de próstata son:
- Estreñimiento o heces aplastadas.
- Dificultad y dolor al orinar.
- Heces con sangre o pus o sangrado por el pene
- Manera de caminar extraña con rigidez o cojera.
El problema principal de la próstata que puede afectar al perro es la hiperplasia prostática benigna, que al igual que en los seres humanos, suele aparecer en el perro anciano. En este caso, la próstata aumenta de tamaño y ejerce presión sobre la vejiga causando problemas urinarios muy molestos, que pueden empeorar de forma muy gradual, a medida que avanza la edad del perro.
Los perros en ocasiones, también pueden sufrir infección urinaria causada por bacterias que entran en las vías urinarias y que a su vez pueden causar la inflamación de la próstata. En estos casos la infección bacteriana puede causar sangre al orinar.
Es poco frecuente pero los perros ancianos también podrían sufrir cáncer de próstata. El cáncer de próstata puede causar la muerte del perro, por varias razones como es la dificultad para eliminar la región afectada y porque en ocasiones, cuando se ha diagnosticado se encuentra en estado avanzado y ya puede haber afectado a otras zonas.
Sin embargo no todos los problemas de la próstata en los perros son graves y si se detectan precozmente pueden ser tratados y no afectar a la longevidad del perro. El tratamiento dependerá de la edad del perro y de la gravedad del problema.
El diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado ayudan a controlar de manera satisfactoria la enfermedad, en la mayoría de los casos, por lo que sería aconsejable a partir de los siete años o incluso antes, hacer revisiones para controlar y diagnosticar la enfermedad cuanto antes.
Lo mejor para prevenir cualquier problema de próstata es vigilar cualquier síntoma sospechoso, alimentarle con una dieta equilibrada y cuidarle para que nuestro perro tenga una vida saludable.