Correr con nuestro perro
Cada vez son más las personas que salen a entrenar acompañados de su mascota. Y tiene muchas ventajas. Los perros son corredores por naturaleza.
Ellos no se obsesionan por las calorías o los kilómetros recorridos, lo hacen porque sí. Porque disfrutan. Además no les da pereza y no buscan excusas para saltarse el entrenamiento.
Según un reciente estudio de la Universidad de Michigan, las personas que salen a correr o simplemente a caminar con sus perros tienen un 34% más de probabilidades de abandonar la vida sedentaria y practicar más de 150 minutos de actividad física a la semana que la gente con otros animales o ninguno.
Los perros son animales de costumbres y nos ayudarán a cumplir con nuestro plan de entrenamiento porque si tú no sales a correr, él se las ingeniará para levantarte del sofá o de la cama. Pero igual que él hace eso por ti, tú también debes hacer algo por él.
Antes de empezar a correr con tu mascota deberás tener en cuenta una serie de cosas y la primera es que debes respetar al resto de corredores: si entrenas en un lugar público, tu mascota debe de estar siempre atada.
Lo que debes tener en cuenta si quieres correr con tu perro:
- Espera que crezca: Si tienes un cachorro deberás esperar a que esté su esqueleto y músculos estén del todo formados, de lo contrario podrá haber lesiones y hasta provocar ciertos problemas de crecimiento. Por lo tanto, se paciente... Ya podrás salir a correr con él en unos meses.
- Ten en cuenta la raza de tu perro: Todos los perros pueden salir a correr unos minutos, pero si tienes un perro braquicéfalo (carlino, bulldog, etc) tu perro no aguantará una gran carrera, no le fuerces, ya que podrías poner gravemente en riesgo su salud. Igual que si tienes un perro muy pequeño, para alcanzar tu ritmo deberá aumentar su pisada al triple de velocidad pudiendo darle un colapso por agotamiento. Lo ideal es salir a correr con razas medianas y grandes.
- No corras bajo el sol: Recuerda que nuestros perros no sudan y que su sistema de autorregulación para eliminar el calor es diferente. Así evitarás los temidos golpes de calor.
- Entrena de forma gradual: Igual que tú, tu perro necesita ir adaptando sus músculos para la carrera de una manera progresiva para evitar lesiones.
- No le des de beber justo antes ni después de correr: Si lo haces, su estómago lleno de agua con el movimiento podría girarse provocando una torsión de estómago. Espera unos minutos antes tras el entrenamiento.
- Usa el material adecuado para él: Igual que tú llevas unas zapatillas específicas no vale salir con la correa normal a correr y menos con collar. Lo ideal es un arnés específico para correr y el uso del cinturón de canicross. Pero si estas empezando un ramal de 2 metros te servirá para que tu perro tenga espacio y tú puedas llevarlo cómodamente.
Por último, y no menos importante, si estas pensando salir a correr con tu perro haz un chequeo de este en el veterinario para asegurarte de que no sufre ninguna patología en la que esté contraindicado realizar este tipo de ejercicio.
Si todo esta bien... ¡¡Sólo queda correr y disfrutar!!
Fuente: Running